Caos en Tierracaliente; inoperancia de GN y PM

Caos en Tierracaliente; inoperancia de GN y PM

Apatzingán, Mich.- Tras los enfrentamientos suscitados ayer domingo por la tarde en Buenavista Tomatlán, los hechos se recrudecieron la mañana de este lunes hasta convertir en caótica la situación en el Valle de Tierracaliente.

Una serie de enfrentamientos ayer domingo por la tarde y noche en la cabecera municipal de Buenavista, dejó como saldo varios muertos de ambos bandos, según información extraoficial.
La destrucción de la carretera federal que conduce a Tepalcatepec, a la altura de los puentes de acceso a San Juan de los Plátanos, municipio de Apatzingán, y de la tenencia de Santa Ana Amatlán, en la municipalidsd de Buenavista, e incluso en la cabecera municipal, reflejan que se vive un estado de guerra en la zona.
El caos ha crecido paulatinamente esta mañana en la región, ya que los grupos de la delincuencia organizada en conflicto realizaron bloqueos y quema de camiones en el municipio de Gabriel Zamora, entre la cabecera municipal, Lombardía, y Uruapan, según los reportes difundidos en redes sociales.
Está mañana trascendió que un líder de uno de los grupos armados involucrados en los enfrentamientos, se debate entre la vida y la muerte, pero igualmente se trata de información no confirmada, debido a que las fuerzas del orden público se mantienen en resguardo, seguramente en espera de que concluya la crisis de inseguridad.
Sobre este tema, ayer mismo trascendió que elementos de la Guardia Nacional desistieron de fortalecer la seguridad y restablecer el orden en Buenavista, debido a que tuvieron que regresar a sus bases ya que «no pudieron pasar porque la carretera estaba destruida a la altura de Santa Ana Amatlán».
La evidente inoperancia de las estrategias de seguridad federal y estatal, profundiza la crisis económica en la región. Está mañana empresas repartidoras de diversos productos inmovilizaron sus unidades para evitar el posible despojo y destrucción.
En tanto el presidente de la República Andrés Manuel López Obrador rechaza visitar la zona, concretamente Aguililla, por «no hacer el caldo gordo a los periódicos amarillistas», su estrategia de «abrazos, no balazos», no ha funcionado en esta región michoacana y en otras del país.
La presunta llegada de mil 500 elementos de.la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano, parece tener sin cuidado a los grupos delincuenciales. Más aún, la situación prevalece igual que si no hubieran llegado.
La Guardia Nacional en esta región se mantiene pasiva ante los embates de la delincuencia organizada. Sus acciones se reducen a hacer acto de presencia en el centro de la ciudad con la evidente intención de dejarse ver «en pleno trabajo».
Y mientras el.gobernsdor Silvano Aureoles Conejo lucha por conseguir una audiencia con el presidente de la República con el interés de echar abajo la elección de junio pasado en Michoacán, y mientras ayer domingo difundía a los cuatro vientos «la creación de nuevos grupos policiales para fortalecer la seguridad de los mihoacanos», su policía, igual que la Guardia Nacional, es un cero a la izquierda frente a la delincuencia. Más aún, son insistentes las voces en el sentido que de que los elementos policíacos son la punta de lanza que abre camino a las células de delincuentes en sus embestidas que, a final de cuentas, sólo lesionan los intereses de la sociedad en su conjunto, sin que en la práctica hayan tenido efecto los discursos oficiales de rango federal y estatal.