Apatzingán, Mich.- Cuando apenas transcurre el mes de febrero los mantos freáticos han disminuido notablemente, por lo que la producción de agua mediante bombeo en los pozos profundos decayó en un 13 por ciento, explicó el administrador del Comité de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Apatzingán (Capama), Fernando Zaragoza Estrada.
En ese contexto, el funcionario del organismo abastecedor del vital líquido en el área urbana, exhortó a los consumidores a privilegiar el ahorro en el consumo y para ello la primera recomendación es evitar regar las calles, o cualquier otro dispendio, pues en años anteriores la baja en los niveles de agua en el subsuelo comenzaba en abril, y ahora se ha anticipado dos meses.
Puso por ejemplo la producción del pozo profundo en la unidad deportiva “Adolfo López Mateos”, en donde la producción habitual es de 115 litros por segundo y en la actualidad bajó a 102 litros, sin que haya una causa justificada, que no sea la disminución natural en los niveles dinámico y estático.
Zaragoza Estrada dijo, en otro orden de ideas, que el comportamiento del público consumidor en lo que se refiere al pago de cuotas anuales ha sido “excelente”, pues cuando está a punto de concluir el segundo mes del año ha cubierto compromisos el 30 por ciento del padrón de usuarios, aunque, dijo, la promoción realizada en el mes de diciembre de 2017 con tarifas de ese año para pago de 2018, fue “altamente funcional”.
No obstante, expuso que el comportamiento decrece a media de que avanza el año y los mejores ingresos se tienen hasta el mes de junio, por tanto, la segunda parte del año, es decir de julio a diciembre, el Capama enfrenta problemas de liquidez, aunque los programas de economía impuestos al interior del organismo descentralizado han resultado beneficiosos en los últimos años.
En lo que se refiere al ofrecimiento del servicio y gastos de mantenimiento, reconoció que este año se han averiado tres bombas sumergibles en igual número de pozos profundos, lo que ha implicado suspensiones en el servicio y pagos por reparaciones, a diferencia de 2017, cuando a lo largo de los doce meses solamente se tuvieron tres desperfectos.